SEMANA 4
RECURRE A LA ORACION
Génesis 29:30
La Biblia dice que Jacob amó a Raquel “más que a Lea” (Gn. 29:30). Pero el Señor, al ver que Jacob no amaba a Lea, abrió su matriz y ella concibió y dio a luz un hijo. El deseo más profundo de Lea era que su esposo la amara. Su
esperanza humana era que, apenas tuviera entre sus brazos a su primer hijo, el corazón de Jacob se inclinaría hacia ella.
Sin embargo, con cada hijo que dio a luz, la esperanza de Lea se fue desvaneciendo hasta que recurrió a la oración.
Querida amiga ¿Estas orando? Abre tu corazón y derrama tus lágrimas ante la cruz de Cristo. Clama al Señor y escucha sus sabias y maravillosas respuestas. Echa toda tu ansiedad sobre Él… con la certeza de que Él cuida de ti y escucha tus oraciones.
Ora: Amado Padre, enséñame a apegarme a ti en cada momento de mi vida, muéstrame el camino que debo seguir y encamíname en tu verdad, que la oración sea mi primer recurso y que llegar a ti sea mi descanso. Te amo Señor!