SEMANA 2
UN MUNDO QUE TE QUIERE CAMBIAR
Daniel 1:4-7 muchachos en quienes no hubiese tacha alguna, de buen parecer, enseñados en toda sabiduría, sabios en ciencia y de buen entendimiento, e idóneos para estar en el palacio del rey; y que les enseñase las letras y la lengua de los caldeos. Y les señaló el rey ración para cada día, de la provisión de la comida del rey, y del vino que él bebía; y que los criase tres años, para que al fin de ellos se presentasen delante del rey. Entre éstos estaban Daniel, Ananías, Misael y Azarías, de los hijos de Judá. A éstos el jefe de los eunucos puso nombres: puso a Daniel, Beltsasar; a Ananías, Sadrac; a Misael, Mesac; y a Azarías, Abed-nego.
En el capítulo 1 del libro de Daniel, vemos que esos cuatro Adolescentes fueron llevados a Babilonia, al palacio real, para aprender la cultura y la lengua de los caldeos. “Y dijo el rey a Aspenaz, jefe de sus eunucos, que trajese de los hijos de Israel, del linaje real de los príncipes, muchachos en quienes no hubiese tacha alguna, de buen parecer enseñados en toda sabiduría, sabios en ciencia y de buen entendimiento, e idóneos para estar en el palacio
del rey; y que les enseñase las letras y la lengua de los caldeos” (Daniel 1:3-4).
Daniel y sus tres compañeros fueron entrenados por tres años; no obstante, ellos tenían la firme determinación de no dejarse influenciar por el ambiente de Babilonia. El ambiente allí era totalmente diferente, tanto en la manera de vivir, como en la dieta. Aún así, Daniel continuó viviendo según lo que Dios le había determinado.
¿Y tú, Adolescente? ¿Has dejado que el mundo te domine o eres un Adolescente decidido por Cristo?
Detrás de toda esa situación, vemos a Satanás queriendo transformar a esos Adolescentes en caldeos. No sólo trató de cambiarles la manera de vivir y la alimentación, sino que también cambió sus nombres originales por nombres caldeos (v.7). Ahora, el alimento era caldeo, la religión era caldea y hasta sus nombres eran caldeos.
Los nombres hebraicos de éstos cuatro Adolescentes eran: Daniel, Ananías, Misael, y Azarías; nombres relacionados con Dios. Daniel significa “Dios es el juez”; Ananías significa “Jehová es benigno”; Misael significa “¿quién es como Dios?”; y Azarías significa “Jehová es mi socorro”. Sin embargo, sus nombres fueron cambiados a nombres caldeos: Beltsasar, Sadraque, Mesaque, y Abede-nego, los cuales significan, respectivamente, “príncipe de Bel”, “iluminados por el dios-sol”, “¿quién es como diosa saque?” y “siervo fiel del dios-fuego”.
La artimaña de Satanás era unir a esos Adolescentes a los ídolos en sus nombres, en la educación, en la dieta y en la manera de vivir.
De igual manera el mundo desea que tu como adolescentes negocie sus principios, se adapte a un sistema el cual ofrece, haciendo que pierdas tu identidad en Cristo, y adoptes la identidad del mundo. Pero se firme y radical como estos jovencitos, que tenían muy claro quien eran y a que Dios servirían. Un día para decir NO al mundo, pero SI a tus principios.